12/01/2009

SOBREVIVIR A LOS PERIODOS DE SEQUÍA - Madame Guyón

Aunque Dios no tiene otro deseo que impartirse a Sí mismo a los demás, frecuentemente se retrae con un propósito. Quizá sea para quitar de ti la pereza, o quizá no has estado buscándolo con fe y en amor, pero por la razón que sea Él lo hace de Su abundante bondad y fidelidad para ti, a menudo estos periodos donde Dios aparentemente Dios se retrae son seguidos de las caricias de Su amor.


Durante estos periodos quizás empieces a creer que la forma de probar tu fe es a través de un grado de afecto o interés mayor, o por una manifestación grande de fuerza y actividad. Seguramente quizás te digas a ti mismo que esto inducirá a que Dios te vuelva a visitar; no alma querida créeme que así no es, debes esperar el regreso del Amado con amor paciente, humildad, paz y adoración silenciosa. Al hacer estas cosas demuestras al Padre que es Él solo y Su agrado lo que buscas, y no los deleites egoístas de tu propia satisfacción.

No seas impaciente en tus momentos de sequía, espera con paciencia a Dios, al hacer esto tu vida de oración aumentará y será renovada. En abandono y contentamiento aprende a esperar el regreso de tu Amado. Entremezcla tu espera con suspiros de amor. Esta conducta verdaderamente agradará a Dios y le incitará a su regreso.

No hay comentarios.: